Las tendencias

Una de las principales tendencias para esta primavera es el flequillo, que puede ser incluso postizo para no tener que cortar el cabello. La forma de llevarlo es despeinado, como si lo hubiera movido el viento, y cruzando o ladeando varios mechones de pelo hacia un lado para dejarlos caer sobre la frente.

Otra de las propuestas se centra en la coleta, que ahora se reinventa para hacer una falsa coleta, puesto que la cola se recoge en semirrecogidos o moños con una goma de pelo para darle un aire nuevo y más fresco e informal.

Las trenzas también forman parte de las nuevas tendencias, siendo posible llevarlas grandes o pequeñas y recogiendo todo el cabello o solo una parte para decorar la melena. Otras alternativas es hacer moños con ellas o recogidos o bien dejarlas sueltas al más estilo indio o hippie. Con ellas, además, se hace uno de los peinados que está más de moda: dos trenzas de raíz, haciendo cada una de ellas a un lado de la cabeza.

Una versión más actual igualmente llega de las denominadas cornrows, que son unas trenzas de raíz finas y pegadas a la cabeza, simulando peinados étnicos o africanos. La versión más chic se realiza recogiendo estas trenzas en moños que se hacen con mechones a modo de rastas.

Y vuelve la gomina, que años atrás causó tanto furor. En esta ocasión, se apuesta por el estilo de pelo mojado o wet look. La moda impone que se utilice para marcar y elevar un ligero tupé o bien para marcar la raya o dejar un lateral del cabello bien pegado a la cabeza. El total look se consigue aplicándola en todo el pelo, que se peina hacia atrás, con independencia de que el cabello se lleve corto o largo.

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