Aumento de glúteos


Los implantes de glúteos son un procedimiento popular entre quienes desean mejorar el aspecto, la forma y el tamaño de las nalgas. El aumento de glúteos implica la inserción quirúrgica de implantes corporales artificiales en las nalgas de un paciente, a fin de lograr glúteos más grandes, mejor proporcionados y más sensuales.

Los candidatos ideales para el aumento de glúteos tienen deben tener 18 años como mínimo y gozan de buena salud física. Los pacientes deben ser estables desde el punto de vista psicológico y saber que los implantes de glúteos pretenden lograr una mejora estética, no la perfección.

Normalmente, el aumento de glúteos se realiza como un procedimiento ambulatorio que demora entre dos y tres horas. El tiempo que requiere el procedimiento puede variar, sin embargo, en relación con la experiencia del médico, la anatomía del paciente, la técnica empleada, además de otras consideraciones.

Los implantes de glúteos se colocan mediante una incisión que se realiza en el lugar donde se une la nalga con la parte posterior del muslo, o bien, en el pliegue del glúteo (donde las cicatrices no son tan perceptibles). Luego, el cirujano crea una bolsa del tamaño suficiente para colocar los implantes de glúteos. Tanto en los pacientes hombres como en las mujeres, los implantes de glúteos pueden colocarse por encima o debajo del músculo. Una vez colocados los implantes, el cirujano confirma que cada nalga sea simétrica y se vea natural. Se cierran las incisiones y se coloca una faja. Normalmente, los pacientes de aumento de glúteos pueden volver a realizar tareas tranquilas y de baja intensidad a los pocos días. La recuperación total puede tomar varios meses.

Implante de cejas


Una depilación repetitiva y excesiva es a menudo responsable de la desaparición definitiva de los vellos de las cejas.

El trasplante del pelo se ha utilizado con éxito durante muchos años para completar las cejas desiguales o parciales, restaurar las cejas ausentes, e incluso camuflar cicatrices dentro del área de la ceja.

Es posible formar de nuevo las cejas con los trasplantes, es una alternativa interesante al tatuaje permanente. El aspecto obtenido es perfectamente natural e indetectable.

Normalmente se suelen utilizar cabellos, pero si es posible, también se puede utilizar vello del brazo o del torso extraídos por extracción folicular.

Dado que las características genéticas del cabello no son modificadas por la trasplantación, habrá que cortar esos cabellos injertados que van a crecer, lo que tiene como consecuencia que el pelo implantado tendrá un diámetro mayor que el diámetro de un pelo de ceja original. En la práctica, no es un problema, con la condición que los cabellos implantados sean lo suficiente finos.

Hay que implantar un solo cabello o vello a la vez y la orientación de las incisiones tiene que ser perfecta y muy tangencial. Además, para obtener un resultado natural, la curvatura del cabello trasplantado tiene que estar orientada hacía la piel. Hay que orientar los pelos de manera diferente según la zona de la ceja.

El seccionamiento y la colocación de los injertos tienen que ser particularmente meticulosos. Los errores cometidos a ese nivel son difíciles de recuperar, es por eso que hay que dirigirse a un médico especializado en este tipo de intervención.

Este método ha avanzado mucho desde que se empezó a utilizar, ya no es doloroso puesto que se anestesia la zona con anestesia local.

Según la dificultad del trabajo, el precio varía entre 2000-2500 €.