Las claves del masaje para prevenir las varices

masaje-varices
Las varices son un problema que afecta a muchas mujeres, incluso, aunque son jóvenes porque su aparición está relacionada no solo con la edad y el paso de los años. Además de los cuidados que se deben seguir en cuanto a ejercicio y alimentación, también es muy beneficioso, sobre todo para prevenirlas, realizar masajes en casa. Una pauta que igualmente es conveniente seguir cuando ya han hecho su aparición para mejorar y paliar sus síntomas y sentirse mejor.

El masaje

El masaje realmente es muy sencillo de realizar, siendo posible hacerlo en casa y sin la ayuda de nadie. Una forma de hacerlo es cuando se está en la ducha, de manera que se aprovecha el agua para hacer movimientos circulares ascendentes desde el tobillo hasta el muslo de la pierna. Así, se elimina la pesadez o cansancio que se tiende a notar habitualmente, aparte de mejorar la circulación sanguínea. Pero no hay que olvidarse de que el agua no tiene que estar caliente, sino fría.

En casa también es posible realizar lo que se llama un masaje de prevención, que se puede hacer por la noche sin problemas, que es cuando se tiene la sensación de que las piernas están más pesadas.

masaje-varices
El movimiento es muy sencillo. Tan solo hay que dar unas pequeñas palmaditas suaves, pero rítmicas con la mano en posición vertical. Es decir, con el lado externo de la mano, el que está en el dedo meñique. Este gesto hay que hacerlo sobre los muslos para estirar la musculatura y que se active, en consecuencia, la circulación sanguínea.

Para la congestión venosa, tanto para prevenir como si ya ha hecho su aparición, hay otro masaje que es muy recomendable. Lo mejor en este caso es que se haga dos veces al día: una por la mañana y otra por la noche.

El movimiento comienza tumbándose sobre la espalda y levantando una pierna. Las manos deben colocarse en ella a la altura del tobillo, de manera que se va ascendiendo conforme se va a realizando una ligera presión hasta que se llega a los muslos. A continuación, hay que hacer lo mismo con la otra pierna. Una vez finalizado, es recomendable permanecer tumbada, pero con las piernas elevadas, durante unos diez minutos aproximadamente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *