Freno

Con independencia de los consejos que proporcionen profesionales, una de las pautas complementarias a poner en práctica en casa está relacionada con el secado del pelo. Una de las primeras claves es dejar la toalla puesta mucho tiempo. Esto hace que el cabello se enmarañe y se rompa y caiga más al desenredarlo.

Además, hay que tener en cuenta que la humedad debilita la fibra del cabello. Es mejor emplear un turbante de microfibra y dejar secar al aire libre o con el secador a baja temperatura.

El peine que se emplee debe ser de púas anchas o bien un cepillo de fibras naturales para evitar los tirones y, en consecuencia, la rotura del pelo. En cuanto a los peinados, cuidado con el pelo recogido. Las trenzas o coletas tirantes para disimular el pelo estropeado hacen que se perjudique todavía más. La tensión debilita el folículo piloso y propicia la caída. También las gomas parten el pelo. Es recomendable los semirrecogidos sueltos y usar coleteros de espiral o tela.

Más densidad

Y, para parecer que se tiene más pelo y disimular la pérdida por caída, siempre que no haya ninguna contraindicación, una buena opción es hacerse mechas balayage. La clave está en que se aplican de medios a puntas sin tocar la raíz. Esto permite ganar en profundidad, brillo y volumen.

Cuando las puntas estén muy dañadas, la solución pasa por cortes como el shag, ya que se hace a capas con diferentes alturas, ganando en movimiento y volumen.

Más información:

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Aire frío para acabar

Lo único que necesitarás para conseguir un acabado inmejorable será un secador de pelo, un protector del cabello, un cepillo redondo y algunos clips o pinzas para sujetar.

Antes de nada échate el producto que protege el pelo del calor. Este producto no solo sirve para eso, sino que también se encarga de dejarte un pelo brillante una vez acabes la tarea.

Después empieza a secarte el pelo con el secador. Haz esto hasta que el cabello esté un 80% seco. Peina con los dedos el cabello que aún quede húmedo. Acto seguido, sostén el secador a unos 6 centímetros de la cabeza y dale con más potencia a las capas inferiores. Se aconseja no secar en exceso la parte superior de la cabeza.

Una vez hayas hecho esto, divide el pelo en tres partes iguales y seca cada parte por separado. El cepillo redondo te ayudará a peinar el cabello de las raíces a las puntas mientras que lo secas. No quites el cepillo mientras le estés dando con el secador.

Cuando ya estés terminando de secarte el cabello, haz que el aparato expulse aire frío. El are frío ayudará a que no se te encrespe el pelo y hará que te quede un acabado óptimo.

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Eliminar el exceso de agua

¿Cómo utilizar correctamente el secador?, te preguntarás. Pues bien, todo empieza por eliminar el exceso de agua una vez te has lavado el cabello. Esta simple operación contribuirá a que utilices el secador de pelo menos tiempo del necesario. El cabello es más frágil cuanta más agua acumula.

Tu melena agradecerá mucho que emplees un protector de cabello antes de someterla al calor del secador. Una alternativa a esta opción es aplicarse acondicionador o unas gotitas de aceite en el pelo antes de enchufar el secador.

De la raíz a las puntas

A la hora de secarte el pelo, mantén la distancia de seguridad. No acerques el secador más de 30 centímetros del cabello. De lo contrario, te lo estarás quemando.

Tampoco te tomes a la ligera la tarea de secarte el pelo. Se aconseja secar el cabello de atrás hacia delante, separarlo por mechones y empezar de la raíz hasta las puntas.

Si utilizas constantemente el secador, te conviene comprar un champú para pelo seco o reseco. Da igual si tu cabello parece sano y brillante. Lo cierto es que el uso prolongado del secador de pelo contribuye a maltratar el cabello.

Por último, acude a la peluquería cada tres semanas. Pide que te corten las puntas. Éste es un truco más para sanear el pelo. Si sigues estas recomendaciones podrás utilizar el secador todo el tiempo que quieras.

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Los secadores iónicos llevan ya algunos años en el mercado y, ahora, empiezan a tener una buena fama más que ganada a pulso y es que, para todas aquellas a las que la humedad de estos meses lluviosos os traiga de cabeza, este producto será la herramienta perfecta para controlar vuestro cabello.

Iones a tu servicio

El funcionamiento de los secadores iónicos puede sonar demasiado complejo. Los iones son átomos con carga positiva o negativa. Estos secadores tienen iones con carga negativa que contrarrestan la carga positiva del cabello (la electricidad estática) que se genera con el cepillado o el secado con toalla.

Esto da como resultado un secado mucho más rápido y menos perjudicial para el cabello. Además, estos pequeños átomos hacen que las gotas se conviertan en micromoléculas que en lugar de evaporarse con el secado se reabsorben por el cabello lo que le proporciona un acabado suave y brillante.

Pon iones en tu vida

Y muchas os estaréis preguntando: ¿vale la pena? La verdad es que depende un poco del tipo de cabello que tengáis. Si tenéis un pelo liso, que no se encrespa, fino y dócil, podéis pensar que este tipo de secadores no funciona pues, en realidad vuestro pelo, tiene unas características que hacen que de por sí luzca suave y sedoso.

Pero, si tenéis un pelo más rebelde, notaréis un gran cambio al utiliza un secador iónico en lugar de un secador normal. Son muchas las firmas de electrodomésticos que venden este tipo de secadores pero os recomiendo que compréis uno de una marca especializada en peluquería, como Remmington o GHD. Los resultados serán inmejorables.

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