Con la primavera llegan nuevas tendencias, pero también nuevos productos. En esta ocasión vamos a hablar de Kiko porque la marca ha vuelto a sorprender con su nueva sombra de ojos porque es muy versátil y va más allá de lo que es meramente este cosmético. Y es que, además de utilizarse como tal, Cream Crush, como se ha denominado, es posible emplearla también como delineador de ojos. La clave está en los consejos de utilización para obtener el mejor resultado.
La sombra
Además de la versatilidad de ser sombra de ojos y delineador, Cream Crush de Kiko también se caracteriza por su larga duración, llegando a permanecer en el rostro hasta unas diez horas sin que se produzca ninguna alteración.
Este nuevo producto está formado por una gama de 16 colores, que van del mate perlado hasta el más negro absoluto. Todos ellos se caracterizan por una gran intensidad y por tener un acabado aterciopelado y radiante. Además, es compatible con otras sombras en polvo o en crema que ya tengas y con las que quieras combinarla.
Aplicación
Este producto es muy fácil de aplicar. Si se va utilizar como sombra de ojos, tan solo hay que extender el producto por el párpado móvil hacia el extremo exterior. No obstante si aquí se quiere aplicar también delineador, con un pincel más fino se puede hacer un trazo a ras de las pestañas, difuminando la línea hacia el interior del ojo. También es posible, si te gusta más, hacer una línea más gruesa para intensificar la mirada.
En el supuesto de que solo quieras utilizarla como delineador, el secreto está en utilizar un pincel que te permita realizar una línea fina desde el ángulo interno del ojo, que tienes que ir haciendo más gruesa conforme se llega al ángulo externo. Puedes terminar con un ligero rabillo como si llevaras realmente un eyeliner. Igualmente es posible utilizar Cream Crush para delinear el ojo en la línea inferior de las pestañas, teniendo que emplear un pincel que sea todavía más fino.