Este mes de julio se está caracterizando por las altas temperaturas que, de momento, parece que no van a bajar. Evidentemente son días de calor con los que puede que se tenga menos ganas de hacer ejercicio y actividades al aire libre. Sin embargo, no hay que dejar de practicarlas porque el mercurio del termómetro haya decido que no baja. Con unos consejos puedes hacer deporte perfectamente sin correr riesgos por el calor.
Los consejos
En primer lugar, hay que elegir bien la ropa con la que se va a hacer deporte porque hace más calor y se suda más por lo que la piel necesita transpirar mejor. De este modo, es mejor optar por fibras naturales como el algodón o bien optar por prendas especializadas en función del deporte que se practique y que tengan en cuenta la sudoración.
También es muy importante no hacer el ejercicio en las horas de más calor. En este caso, puede ser conveniente realizar algunos cambios en la rutina del ejercicio, evitando las horas del mediodía y las primeras de la tarde, así como a partir de las 12.00 horas de la mañana. Lo más adecuado es practicar el deporte en las primeras horas de la mañana o bien a últimas de la tarde, cuando el sol ya se ha ido. Así evitaremos que nos pueda dar un golpe de calor.
Y, si cuando se hace ejercicio, estar hidratado es importante más lo es aún en esta época del año. Es recomendable beber agua cada poco tiempo mientras se hace el ejercicio, aunque sea poca cantidad, para evitar deshidrataciones y afecciones del calor. Una buena opción es combinar o alternar algo de agua con bebidas energéticas, pero cuidado con estas últimas si estás intentando adelgazar. Sea cual sea la opción que elijas bebe antes, durante y después del ejercicio.
Por supuesto, si la actividad la realizas al aire libre no te olvides de utilizar protección solar para cuidar la piel y que no te quemes ni te salgan manchas o aparezcan otros problemas en la dermis. Algo que es más fácil de lo que inicialmente se piensa porque al estar en movimiento y distraído la persona no se da tanta cuenta de que está expuesta a los rayos solares. La protección solar tienes que aplicarla aunque sean horas bajas de radiación solar.