Anteriormente, ya hemos comentado las tendencias para este otoño 2017 en maquillaje y peluquería y, ahora, le toca el turno a las manicuras porque, como supondrás, también llegan novedades, aunque hay algunas tendencias del invierno pasado que van a seguir estando de moda. Las propuestas son muy variadas: desde los clásicos como los tonos nude a los más oscuros y negros y las reinvenciones de propuestas como la manicura francesa, entre otras opciones.
Colores oscuros
Una de las tendencias que viene pisando fuerte es lucir unas uñas con esmaltes de tonos oscuros. Y, cuanto más oscuros sean, mucho mejor. De hecho, el color que se impone es el negro más profundo. Junto a él, también son tendencia para las menos atrevidas los colores morados y los marrones, gama esta última dentro de la que irrumpe con fuerza el tono tawny, que es una especie de marrón más claro con un toque anaranjado.
En las uñas tampoco faltarán este otoño los rojos en los tono más vivos, aunque otra de las opciones que se sigue llevando son los colores más oscuros como los burdeos, llegando incluso al rojo-negro.
Metalizados
Los tonos metalizados llegan con fuerza esta temporada. En este caso, los colores que más se llevan son el plateado, así como el dorado. Para las que quieran seguir esta tendencia, pero prefieran algo menos llamativo, una buena alternativa es el tono cobre.
No pueden faltar tampoco los tonos glitter ni el cromo, que es otra de las grandes novedades de esta temporada. En realidad, bajo este nombre se esconde no un esmalte, sino unos polvos que se ponen con un gel permanente. Su aplicación puede hacerse de dos maneras: en toda la uña como si se llevara un esmalte normal o bien por encima de ella, pero solo en una parte, como si fuera un glitter.
Uñas de diseño
Además de las manicuras de un solo tono como las que hemos comentado anteriormente, este otoño hay otra propuesta que es interesante. Se trata de llevar las uñas de más de un color. Pero no se trata de lucir todo un arco iris, sino de elegir un tono principal para toda la base, que será más claro, sobre el que se pueden colocar algunos detalles de otras tonalidades de forma aleatoria para crear el dibujo o diseño que se prefiera.
Por ejemplo, se pueden añadir motivos geométricos, pintar solo así alguna uña de las manos o bien reinventar la tradicional manicura francesa. En este caso, una de las mejores opciones es cambiar la línea blanca que se hace en el extremo de la uña por otro color como por ejemplo el dorado y, en el resto, aplicar el tono negro, entre otras muchas posibilidades de combinaciones.
Discretas
Para quienes prefieran unas uñas más discretas, la opción pasa por los tonos nude, que de momento se siguen quedando en la paleta de colores de moda, o bien simplemente por aplicar una capa de brillo.