La mayoría de los peinados son muy versátiles y gracias esta característica, se pueden adaptar a las diferentes formas de cara de cada persona. Debes experimentar con las opciones que tu corte y estilo te proporcionan hasta encontrar la combinación perfecta. Con el fin de conseguir un peinado fabuloso es importante que prestes atención a tu flequillo y a la forma redonda de tu cara. No debes olvidar que además de las redondeces de tu cara, es posible, que tengas otros rasgos prominentes.
En primer lugar, es altamente recomendable elegir el peinado que más alargue tus facciones y no muestre claramente tanta redondez. La clave para esta elección es darse cuenta que debes minimizar la redondez. Deberás elegir los ángulos y las líneas que crean la ilusión de la longitud y la estrechez. Debes fijarte en la forma de tus pómulos y la longitud de tu cuello. Una vez realizado el estudio, ya puedes elegir tu corte de pelo.
La palabra clave, cuando se decide realizar un corte nuevo, es: duración. Recuerda que tu pelo puede crecer rápidamente y en pocas semanas tu peinado perfecto se puede convertir en un peinado horrendo. Si te gusta llevar flequillo, intenta que te lo corten de forma desigual. Este tipo de corte permitirá que la redondez se transforme en una forma ligeramente ovalada y alargada.
Utilizarás las capas en cuanto descubras su estilo alargador. Con esas habilidades creativas que te caracterizan, da volumen a tus puntas. Evita los “peinados planos”.