La espuma, junto con los geles, fijadores y cera, se ha convertido en uno de nuestros grandes aliados a la hora de cambiar nuestro look, nuestro estilo o, simplemente, moldear nuestro peinado. Sin embargo, a veces es algo engorroso aplicarla, ya que, aunque los peluqueros nos aconsejan poner una nuez de espuma en nuestra mano y extenderla por el cabello, muchas veces no estamos seguras de cuánta usar, con lo cual, o nos queda el pelo completamente lleno de espuma, con lo cual el cabello nos sigue quedando lacio o apelmazado o utilizamos demasiado poca, con lo cual no logramos el efecto que queremos darle al cabello.
Por ello te damos unos consejos sobre como aplicarla:
– Antes de echarte la espuma, sécate bien el pelo con la toalla, de forma que aunque esté húmedo, no gotee.
– En lugar de echar el producto en la mano, échalo en el peine y peina tu cabello, cuidando de pasar por todas las zonas del pelo. De este modo se extenderá uniformemente por todo el pelo.
– Si tu cabello es muy lacio y quieres darle volumen, echa la espuma en el peine y, con la cabeza hacia abajo, extiende la espuma desde la raíz a las puntas. Si quieres que el efecto dure más, sécate después el pelo con el secador.
– Otra variedad de la técnica anterior es aplicar la espuma con el peine, desde la raiz a las puntas y después, con la cabeza hacia abajo, sécate bien el pelo con una toalla (esta vez no uses el secador, porque el resultado no te gustaría).
– Recuerda que, si utilizas habitualmente la espuma, es bueno que te apliques semanalmente una mascarilla nutritiva, ya que la espuma puede ser un poco agresiva para tu cabello.