Los puntos negros surgen normalmente en la piel grasa, debido al taponamiento de los poros. Esto hace que se acumule suciedad en ello, produciéndose lo que conocemos como punto negro. Una de las reglas de oro para eliminarlos es la limpieza de la piel, pero también existen otros modos de hacerlos desaparecer:
– Frota medio tomate maduro en la zona donde tienes los puntos negros y déjalo reposar durante un cuarto de hora. Después aclárate con agua templada.
– Aplicar vaporizaciones, para abrir los poros y hacer que salga la grasa acumulada en ellos. Para realizarlas, sigue los siguientes pasos:
– Antes de comenzar, lávate la cara con un jabón suave y enjuágate con agua tibia.
– Después, realiza un masaje suave sobre toda la superficie del rostro con aceite de jojoba, que te ayudará a suavizar los poros.
– En una olla o cacerola, hierve aproximadamente dos litros de agua con una cucharadita de cualquiera de las siguientes hierbas: lavanda, sauco, menta o romero. Todas ellas tienen propiedades antibacterianas, lo cual te ayudará a prevenir la infección de los poros cuando estén abiertos. Cuando hierva, déjala en el fuego hasta que llegue al punto de ebullición. Después y dejar que llegue a ebullición. Apaga el fuego y deja enfriar la preparación durante cinco minutos.
– Coloca la olla o recipiente sobre una mesa y retira la tapa. Acerca tu rostro a unos 20 centímetros y cúbrete la cabeza con una toalla. Tienes que notar como el vapor llega a tu cara. Permanece en esta posición cinco minutos. Después, elimina los puntos negros, presionando suavmente con la yema de los dedos previamente lavados con agua y jabón.
Cuando los hayas eliminado, lávate la cara con un jabón suave y agua tibia. Después aplica con un algodón un tónico para la piel para ayudar a cerrar los poros.