Como bien sabrás, la piel produce una “lubricación” natural. Sin embargo, en algunos casos, este aceite se queda atrapado en el interior de los poros de la piel, lo que hace que la superficie de la piel afectada se vea afectada por los conocidos y antiestéticos granos. Normalmente, los granos comienzan a producirse más durante la pubertad y pueden continuar produciéndose hasta los veinticinco años, en la mayoría de los casos.
Esto sucede sobre todo, porque durante la juventud, el cuerpo experimenta una oleada hormonal, que hace que la piel produzca un exceso de sedo. Intenta prevenir la aparición de los granos, para ello, aquí tienes unos consejos que te puede ayudar:
– Mantén la piel limpia
Utiliza un jabón especial para limpiar tu piel, por lo menos dos veces al día. Intenta que el jabón o el producto que utilices, contenga peróxido de benzoilo, ya que este químico es el más eficaz en la descomposición de la acumulación de aceite y en desaparición de las bacterias que causan los granos.
– Evita el exceso de calor y la humedad
El calor y la humedad pueden hacer que se produzca más sebo y este se quede en diferentes zonas de la cara. Si tu piel es aceitosa, lo mejor es que evites las zonas calientes y húmedas.
– Selecciona los productos para cuidar tu piel con cuidado
Si tu piel es grasa y no eliges una buena crema hidratante, lo único que conseguirás será que tu piel sufra la aparición de nuevos granos. No utilices demasiado maquillaje y cada vez que lo hagas, recuerda limpiar posteriormente tu rostro.