Generalmente tenemos en cuenta nuestro tipo de piel a la hora de adquirir productos de maquillaje o para el cuidado de nuestro cutis, pero muchas veces nos olvidamos de ello en la rutina diaria del desmaquillado, utilizando cualquier producto que puede no ser muy apropiado para nuestro tipo de piel. Para evitarlo te suceda, te mostramos cómo desmaquillar tu cutis tanto si tienes la piel seca o la piel normal.
Si tienes la piel seca:
– No utilices jabones o geles limpiadres aunque tengan formulación grasa, ya que la epidermis seca se deshidrata más al entrar en contacto con el agua, sobre todo si es rica en cal. Lo mejor es utilizar una crema limpiadora que tenga un gran poder hidratante. Para aplicarla, deberemos poner un poc de crema en nuestras manos y frotarla entre ellas para luego aplicarla al rostro. De este modo la limpieza serás más eficaz. Después de aplicártela debes aclararte el cutis con agua.
– Es aconsejable reemplazar el tóncio con agua de rosas. Notarás tu piel más suave.
– Si vives en un clima extremo, con mucho frío o mucho calor, puedes desmaquillarte con aceite de almendras o aceite de oliva, aplicando inmediatamente después el tónico facial.
Si tu piel es normal:
– No utilices productos que puedan resecarte la piel, como los tónicos con gran contenido en alcohol. Elige productos sin fragancia.
– Si tu piel tiene aspecto cansado, puedes reemplazar el tónico por agua de infusión de manzanilla o agua de rosas.
– Si no tienes crema limpiadora, puedes empapar una toalla en agua bastante caliente, aunque siempre sin quemarte y aplicarla sobre tu rostro durante dos o tres minutos. Después frótate el cuello y el rostro con la misma toalla y para finalizar aplícate agua fresca.