Cuando utilizamos mascarillas u otros productos hechos por nosotras en casa con productos naturales, normalmente están pensados para pieles maduras, ya que son las necesitan más tratamiento debido a las arrugas, la pérdida de elasticidad, brillo etc. Sin embargo, las adolescentes también pueden utilizar estos remedios caseros que les van a ayudar a mantener su cutis libre de granos y a conseguir una piel más luminosa y radiante.
– Exfoliante: Aunque no tan a menudo como las pieles más maduras, la piel del rostro de las adolescentes también necesita ser exfoliada para eliminar las células muertas. Para ello, nada mejor que utilizar una mascarilla realizada con tres gotitas de glicerina, tres gotitas de zumo de limón y tres gotitas de aceite de almendra. Prepararla es muy sencillo, ya que sólo es necesario mezclar los ingredientes y después aplicarla sobre el rostro, siempre sin restregar, presionando ligeramente la piel. De este modo conseguiremos limpiar la piel de grasa y suciedad que obstruye los poros, evitando así la aparición de granos, puntos negros y espinillas.
– Cerrar los poros: El exceso de grasa que puede acompañar a la piel en la adolescencia puede hacer que los poros se dilaten en gran medida, siendo muy visibles y afeando la apariencia del cutis. Cerrarlos es sencillo, ya que sólo necesitamos un yogur de leche entera que esté frío y aplicárnoslo sobre la cara durante unos diez minutos. A continuación enjuagamos con agua fría y veremos cómo el tamaño de los poros ha disminuido.
– Mascarilla antiacné: Nada mejor que unas deliciosas fresas para librarnos de esa tortura que acompaña a las adolescentes. Debemos tomar algunas fresas y hacer con ellas un puré, triturándolas con el tenedor. A continuación lo aplicaremos sobre el rostro, lo dejaremos actuar durante quince minutos y finalmente nos aclararemos con agua tibia tirando a fría.