Aunque estemos llegando al invierno eso no quiere decir que la gente deje de casarse, es más, seguro que tenéis alguna que otra boda en lo queda del año. A parte del look que vayamos a lucir, el peinado, junto con el maquillaje, es una de las cosas que nos trae de cabeza.
Lo bueno del invierno es que se pueden llevar semirecogidos, e incluso el pelo suelto, sin pasar calor, pero, lo cierto, es que un peinado trabajado siempre es una opción válida, y siempre da gusto llevarlo.
Recogidos de alfombra roja
Si tu look es sobrio, prueba a deslumbrar con un peinado de alfombra roja. Como si de una celebtity se tratase, luce un peinado trabajado y que destaque por su complejidad. Un moño italiano, por ejemplo, o un peinado de inspiración griega son opciones perfectas y clásicas.
Si quieres apostar por un look más fresco, que contrarreste la sobriedad de tu outfit, prueba con un peinado a lo pin up. Con tupés y ondas crea un look exagerado pero muy bien definido. Si optas por recogerte todo el pelo, trabaja tanto la zona forntal como la trasera. Si optas por un semirecogido, dale volumen al frente y llena tu pelo de ondas.
Un toque desenfadado
Este será tu look si la carga de estilo se centra en un vestido contundente. Lo mejor es contrarrestar los brillos y el glamour con uno de esos recogido que parecen hechos deprisa y corriendo pero que, en realidad, requieren tanto o más tiempo que un recogido con un acabado perfecto.
Apuesta por las trenzas y las ondas y combínalas para crear un aspecto divertido y juvenil. Las trenzas fishtail están de última moda y, combinadas con un moño bajo, te darán un aire bohemio y naïf. Juega con las diademas o luce un tocado que complete tu peinado y que marque la diferencia.