Cuando hablamos de pestañas postizas parece que estamos hablando de un complemento de la belleza femenina que estuvo de moda hace algunas décadas, pero cuyo uso ha ido decayendo hasta casi desaparecer. Y aunque es verdad que hoy no son algo que las mujeres utilicemos a diario para realzar la belleza de nuestro rostro, el hecho de que cada día más actrices de Hollywood las utilicen está haciendo que retornen a nuestros neceseres poco a poco.
Es indudable que las pestañas postizas son de gran ayuda si tenemos nuestras pestañas poco pobladas o queremos conseguir una mirada muy sexy, pero para obtener unos resultados óptimos deberemos seguir algunos consejos tanto a la hora de colocárnoslas como a la hora de retirarlas, para evitar causar cualquier daño a nuestras pestañas naturales.
Lo primero que tienes que hacer es verificar el largo de las pestañas para que no resulten artificiales siendo demasiado largas.
A no ser que quieras dar a tu maquillaje un toque extravagante, elige un largo que resulte natural. Si no encuentras pestañas de la longitud que deseas, no te preocupes, porque puedes recortarlas.
Para comenzar lo primero que debes hacer es limpiarte bien la zona de los ojos, para eliminar las impurezas. A continuación coge la pestaña y aplícale un poco de pegamento. Recuerda que nunca debes aplicarlo sobre tus pestañas verdaderas, ya que corres el riesgo de dañarlas o de que te entre pegamento en los ojos.
Colócalas siguiendo la línea natural de tus pestañas y, con la ayuda de un palillo, acomódalas para que resulten naturales. Deja secar el pegamento unos minutos y finalmente maquíllate como desees.
Para quitártelas sólo tienes que humedecer tus ojos con agua tibia o leche limpiadora. Deja pasar unos segundos hasta que el pegamento se ablande y ya puedes quitártelas.