El maquillaje, además de permitirnos resaltar los rasgos más bellos de nuestro rostro, también nos ayuda a corregir pequeños defectos del mismo, logrando así armonizar los rasgos del rostro, y con ello conseguir un extra de belleza. El corrector y la base de maquillaje son los productos que más utilizamos para corregir esos defectos, pero si lo que quiérenos es lograr unos ojos perfectos, podemos lograrlo gracias al delineador.
– Si tienes los ojos caídos, para levantarlos, debes utilizar tres sombras de ojos además del delineador. Una sombra debe ser clara, la otra media y la última oscura. Comienza aplicando las sobras en el arco superior de las pestañas, desde la mitad de las pupilas hacia fuera, empezando por la más clara y aplicando la más oscura en la esquina exterior del párpado. A continuación dibuja una línea muy fina con el delineador que prefieras.
– Si tienes los ojos muy juntos, toma un perfilador negro, gris o marrón y delinea el ojo comenzando aproximadamente en el tercio exterior del párpado superior hacia afuera.
– Si tienes los ojos muy separados, debes realizar la operación contraria, es decir, aplicar el eyeliner lo más cercano posible al lacrimal, en ambos párpados y haciendo el trazo más grueso según progresas hacia afuera. Difumina la parte final del trazo.
– Para corregir los ojos hundidos, aplica el delineador en la línea de pestañas del párpado superior, preferiblemente en tonos pálidos para no acentuar la caída del párpado. . En la línea inferior aplícate un delineador en un tono neutro.
– Si quieres hacer que tus ojos parezcan más grandes, perfila en negro o marrón el párpado superior, aumentando el grosor del trazo según avanzas hacia el exterior del ojo. En el párpado inferior aplica un delineador en dorado, plateado o blanco. No dudes que tu mirada será el centro de atención.