Los vestidos escotados son los que más nos favorecen a las mujeres. Pero si queremos estar realmente arrebatadoras, deberemos proporcionar a nuestro escote unos sencillos cuidados que lo hagan lucir joven y bello. Debemos tener en cuenta que una de las zonas de nuestro cuerpo que más trasluce nuestra edad es el escote, por lo que de nada sirve tener una cara muy cuidada y unas manos muy tersas si nos olvidamos de esta parte de nuestro cuerpo y dejamos que la piel se seque y se arrugue.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que, desde el cuello hasta el inicio del pecho, la piel es muy fina y frágil, por lo cual es muy sensible a factores externos como el sol, el frío, el viento, etc. Por ello, aunque un escote moreno es un escote realmente bello, no debemos descuidar nunca esta parte del cuerpo cuando tomemos el sol en la playa o en la piscina o salgamos a caminar por la montaña o el bosque.
Por ello debemos utilizar diariamente una crema hidratante que tenga al menos un factor 15 de protección solar. Si tu piel es clara y fina, utiliza mejor una crema con efecto pantalla total para que tu escote quede perfectamente protegido.
También es muy importante que no olvides el escote cuando te desmaquilles. Muchas veces nuestra limpieza del maquillaje se limita a la cara o a la parte superior del cuello, y nos olvidamos de él, permitiendo que se acumulen las células muertas y las impurezas.
Si en tu escote han aparecido manchas o pecas, puedas utilizar una crema despigmentante o un peeling suave que aclare un poco el tono de tu piel. Aunque recuerda que no son aconsejables los peelings profundos en esta parte del cuerpo.