Hasta ahora el contouring era una técnica de las famosas que se aplicaba al maquillaje. Sin embargo, da un paso más y salta del rostro al cabello para modelarlo también según sus rasgos y en función del peinado o corte de pelo que se lleve. Como siempre, las famosas, toman la delantera y esta técnica está causando ya auténtico furor.
Contouring
La técnica del contouring sigue prácticamente las mismas pautas que en el maquillaje, es decir, se juega con diferentes tonos de color y con la forma del rostro para que, con el corte de pelo o peinado, se consiga potenciar las facciones o áreas de la cara que se desee.
Normalmente, se emplean dos o tres tonos para cuya elección se debe tener en cuenta el color de la piel. De este modo, las mujeres de piel más blanca es mejor que opten por los tonos más dorados, cobrizos ligeros y los colores avellana, mientras que las que sean más morenas se verán más favorecidas con los marrones que tengan un cierto toque cobrizo o rojizo.
Además del color, también hay que prestar atención a la forma del rostro. Las caras que son más alargadas tienen que elegir cortes de pelo con los que se consiga crear volumen en los laterales de la cara. En estos casos, los colores elegidos se tendrán que aplicar en las raíces en el caso de los más oscuros para ir haciendo luego un degradado hasta emplear los más claros en las puntas del cabello.
Las pautas para la cara redonda se centran en dar volumen en el cuero cabelludo en la parte superior de la cabeza, teniendo que poner los colores más claros en la zona de alrededor de la línea del pelo, es decir, por las raíces que quedan más cerca del contorno del rostro, mientras que los tonos más oscuros se aplican en la zona medio del cabello hasta sus puntas.