Las mechas son una buena opción cuando no se quiere hacer un cambio drástico de color de cabello o bien para disimular las primeras canas. Sin embargo, muchas veces, ante la amplia variedad de estilos y técnicas, así como de colores, es difícil tomar una decisión sobre cuáles pueden ser las más favorecedoras. Aquí te damos una serie de consejos para que elijas según el color de tu cabello y el resultado que quieras conseguir, aunque vamos a apostar en todos los casos por la naturalidad.
Las más sutiles
Las mujeres que deseen hacer un cambio sutil y que no sea muy llamativo, la mejor opción es realizar unos reflejos. Además, es una buena alternativa para aquellas personas que lleven el pelo corto o bien opten por cortárselo y cambiar de look.
Rubias
Quienes tengan una melena larga y rubia, la mejor elección son las mechas que se hacen en degradé, de manera que se van aclarando conforme van llegando a la zona de las puntas del pelo.
En función del efecto que se quiera conseguir, hay varias opciones. Una de ellas son las mechas californianas, que son más acentuadas y que se hacen en diversos tonos desde la raíz a las puntas.
En el caso de buscar simplemente un efecto para que el cabello parezca más luminoso, es más que suficiente con aplicar unas mechas y aclarar el tono del cabello en uno o dos tonos como máximo.
Castañas
Para las melenas castañas, hay otras opciones. Las mujeres que deseen un efecto natural, tienen que optar por las mechas que se hacen con brocha y a mano alzada. De esta manera, se consigue que el nuevo tono se complemente con la base y que solo destaquen los puntos en los que se necesita ese aporte extra de luminosidad. Además, es importante incidir en las zonas que están más cerca del rostro para dar un mayor halo de luz.