Tener un vientre plano no solo se consigue haciendo ejercicio y perdiendo peso porque en las mujeres hay más causas que pueden hacer que esa zona del cuerpo se inflame o se hinche. Entre los principales problemas se encuentra el estreñimiento, la retención de líquidos, el ciclo menstrual o los gases. Pero para cada uno de ellos, hay una solución.
Los consejos
Dentro de las posibles causas que hinchan el abdomen se encuentran los gases, siendo la solución vigilar la dieta de lo que se come intentando controlar el consumo de los productos que los suelen generar. Sin embargo, no hay motivo para eliminarlos de las comidas. Por ejemplo, para ingerir legumbres, una buena opción es hacerlas en puré y añadirle algunas especias como el comino.
En el caso de las retenciones de líquidos, la mejor alternativa para combatirla y que no parezca que se tiene más tripa es consumir alimentos que son unos auténticos reguladores de las retenciones líquidos por su contenido en potasio. Entre ellos, está el plátano, el kiwi, la naranja y el aguacate…
También son muy útiles los que contienen vitamina C, aunque es para quemar la grasa abdominal, al contribuir esta sustancia a liberar L-Carnitina, que es fundamental para este proceso de quema.
Para aquellos días en los que el abdomen hinchado es por motivos del ciclo menstrual, que suele conllevar una retención de líquidos, una buena opción es tomar magnesio que está presente, por ejemplo, en frutos secos, verduras verdes y cereales integrales. Además, este mineral también es de ayuda para tener más controlados los cambios hormonales.
Y, finalmente, se puede optar por utilizar algún antiinflamatorio que sea natural. Uno de los mejores es el jengibre en cuya composición hay una encima que ayuda a reducir los gases que se generan al tomar proteínas. Son solo algunos consejos para complementar las dos pautas generales: alimentación cuidada y ejercicio diario.