Maquillarse para ir a la oficina no siempre es sencillo, ya que debemos encontrar la combinación perfecta entre un maquillaje que nos dé un poco de color y nos embellezca al tiempo que resulte profesional y no demasiado llamativo. Es por ello que muchas mujeres simplemente optan por pintarse los labios al no saber muy bien cómo hacerlo. Sin embargo, siguiendo algunos consejos, maquillarse para la oficina resultará sencillo:
– Como el maquillaje debe pasar lo más desapercibido posible, es muy importante que la piel del rostro esté muy cuidada. Para ello debes comenzar limpiándote el rostro, para después aplicar una crema acorde con tu tipo de piel y, opcionalmente, puedes aplicar una base de maquillaje fluida con una esponjita del mismo tono que la piel de tu rostro.
– Ojos: Lo mejor es evitar las sombras de ojos, ya que son más propias de un look de noche. Por ello nos limitaremos a delinear los ojos, utilizando preferentemente un pincel fino.
Delinearemos el párpado superior por la línea de las pestañas y, si queremos acentuar nuestra mirada, también el inferior, con lo cual, además de no recargar nuestro maquillaje, habremos ahorrado tiempo, lo cual también es importante cuando en pocos minutos tenemos que salir corriendo hacia la oficina.
Si quieres darles un poco más de color o un toque informal, puedes difuminar suavemente con el dedo la línea del lápiz de ojos sobre le párpado.
– Si lo deseas, puedes aplicarte una capa muy fina de máscara de pestañas, para destacarla un poco. Hazlo sólo si no tienes la costumbre de frotarte los ojos, porque si no la máscara puede terminar en todos los documentos que utilices.
– Labios: Olvídate de los rojos y decántate por los tonos rosas, que darán sensación de frescor y no destacarán demasiado tus labios.