Los ojos son una de las partes más delicadas del rostro y que precisa cuidados específicos puesto que la piel es mucho más sensible. En las tiendas se pueden encontrar diferentes tipos de mascarillas que puedes aplicar una vez o dos a la semana, aunque también hay remedios caseros que tienen un buen efecto y que son más económicos. Además, la ventaja es que puedes aplicarlos cuando quieras. Eso sí, no te olvides de limpiar antes la piel y de aprovechar el tiempo de aplicación para tomarte un pequeño respiro.
Las mascarillas
Para la zona de los ojos una de las mascarillas más efectivas es la que se realiza con pepino. Su utilización es muy sencilla. Tan solo hay que coger un pepino y cortar un par de rodajas, teniendo que ponerlas posteriormente sobre los ojos. El efecto que se consigue es bajar las bolsas de ojos, así como disimular las ojeras, y que el rostro parezca más fresco.
Además del pepino, la manzana es muy efectiva para tratar esta parte del rostro y conseguir igualmente bajar las bolsas. En este caso, hay que hacer una preparación previa que consiste en hervir esta fruta, que anteriormente se ha cortado en rodajas, durante unos 15 minutos. Cuando ya esté tierna, hay que escurrirla y luego machacarla con un tenedor para que quede como una pasta. Posteriormente, cuando aún esté tibia –no tiene que quemar-, se tiene que aplicar bajo los ojos.
Y otra buena solución viene de la mano de las zanahorias y del aceite. Dos productos que seguro que tienes también en casa. La preparación es sencilla. Hay que coger la zanahoria y rallarla, mezclándola a continuación con unas cucharaditas de aceite de oliva. Esta mezcla igualmente la tienes que aplicar sobre los ojos. El efecto que se consigue es una piel más hidratada y relajada, aparte de bajar también las bolsas de los ojos.