Después de lavarnos el cabello, si lo tenemos largo o muy rizado, es habitual que nos encontremos con problemas para desenredarlo y peinarlo con facilidad.
En estos casos, solemos someternos a la tortura de deshacer los nudos del cabello mechón por mechón, sujetándolo mientras tiramos con el cepillo intentando desenredarlo, pero ello no sólo nos hará pasar un mal rato, sino que rompe y debilita nuestro cabello, además de provocar la caída del mismo. Para evitar esto, lo mejor es utilizar mascarillas naturales que nos ayuden a desenredar el cabello y, de ese modo, poder peinarlo con facilidad:
– Mascarilla de aceite de jojoba: Para prepararla necesitas dos cucharadas de aceite de jojoba, cuatro cucharadas de semillas de lino y 200 ml de agua.
Hierve el lino en el agua, removiéndolas hasta que obtengas una consistencia gelatinosa. Cuando lo hayas logrado, apaga el fuego y deja enfriar la mezcla hasta que esté tibia, momento en el que debes añadir el aceite de jojoba. Aplícate la mascarilla sobre todo el cabello, especialmente en las puntas. Envuélvete el pelo en una toalla y déjala actuar durante 25 minutos y termina aclarándote para eliminar cualquier residuo.
– Mascarilla de aloe vera: Mezcla a partes iguales un poco de aloe vera y aceite de jojoba. Esta mascarilla resulta muy práctica, porque sólo tienes que guardarla en un vaporizador y aplicártela sobre el cabello antes de peinarte, y comprobarás lo fácil que resulta pasar el peine.
– Mascarilla de aceite de oliva: En un recipiente mezcla un tercio de taza de aceite de oliva, un tercio de taza de aceite vegetal y un tercio de taza de miel. Calienta la mezcla hasta que hierva, déjala enfriar y guárdalo en un frasco. Aplícate la mascarilla después del champú, desde la mitad del cabello hasta las puntas, sin aplicarlo en el cuero cabelludo. Aclárate y tu cabello habrá quedado perfectamente desenredado.