Cuando estábamos luchando con los cambios hormonales en la adolescencia, siempre teníamos que sufrir los consejos de nuestras madres, abuelas e incluso amigas sobre cómo mantenernos bellas. Algunos de estos consejos eran bastante buenos, pero otros…podríamos decir que no eran todo lo correctos que deberían ser. Hoy te contamos algunos mitos sobre la belleza que, a veces, no son demasiado correctos:
-Las canas nacen sólo por envejecimiento. No es del todo falso, pero seguro que hoy en día no te extrañas de ver a un joven universitario con alguna cana que otra. Estas, también pueden surgir por motivos de estrés e incluso por herencia familiar.
-La mahonesa es un magnífico acondicionador. Este no es un mito, ya que el aceite y los huevos que componen dicha mahonesa son ricos en ácidos grasos y proteínas que nutre el cabello.
-Aplicar hielo en la piel hace que los poros sean pequeños. Nada puede hacer que los poros sean pequeños. El tamaño de nuestros poros es resultado de la genética, no de la temperatura aplicada sobre la piel.
-La pasta de dientes puede curar granos. Bueno, sí. La pasta de dientes junto con el mentol y otros ingredientes activos que la componen puede secar los granos y hacerlos curar mucho más rápidamente que de forma natural. Sin embargo, los mismos ingredientes activos también puede secar e irritar la piel de tu cara, así que es mejor utilizar una crema especial para granos.
-La aplicación de cerveza en la piel antes de ir a tomar el sol hace que te pongas más morena. No, no es cierto. La aplicación de cerveza no hace nada en la piel. Es, de nuevo, una cuestión de genética.