Llevar el pelo adecuadamente no siempre es posible porque tiende a estar revuelto o a encresparse, perder volumen… Son situaciones en las que se pueden adoptar una serie de trucos para que por lo menos, de momento, solucionar ese problema y conseguir ir bien peinada.
Los trucos
Uno de los problemas que se puede tener con el cabello es el encrespamiento, lo que tiene solución con los cuidados adecuados con champús, secados… Pero en aquellos casos en los que se ha producido de forma más ocasional, también se puede poner remedio.
Lo mejor es peinar el pelo descalza para evitar que el pelo se cargue de electricidad estática y sea más fácil poderlo reconducir. Además, también es de gran ayuda hacer una buena hidratación. Por ejemplo, se puede poner unas gotas de aceite desde la mitad de la largura del cabello hacia las puntas, dejando que actúe unas cuantas horas. Si puedes, deja pasar toda la noche mientras estás durmiendo.
En aquellos casos en los que el problema es que el pelo se queda revuelto, lo mejor opción es peinarlo nada más levantarse por la mañana sin esperar a desayunar, ni vestirse, ni maquillarse… El secreto no es otro más que el cabello está más caliente en ese momento y se puede moldear más fácilmente.
Y, finalmente, para aquellas situaciones en las que precisas que el pelo tenga un poco más de volumen, un buen truco es utilizar unos polvos matificantes que tienes que aplicar por la zona de la raíz del cabello y los primeros centímetros de longitud. En tan solo unos segundos, verás cómo ya has conseguido que el pelo tenga más cuerpo y, en consecuencia, volumen.
Otro truco es cambiar la raya de lado periódicamente porque así cambias la orientación de la raíz y consigue ese mayor volumen al quedar el pelo más elevado en esa parte. Además, favoreces a la vez una mayor oxigenación del cabello.