Uno de los aspectos más desesperantes del maquillaje es que nunca conseguimos que dure toda la noche. Si queremos estar igual de radiantes que cuando salimos de casas, no tendremos más remedio que retocarnos de vez en cuando, sobre todo en lo que a las sombras de ojos se refiere, o terminaremos la velada sin casi color en los párpados, y apenas una sombra de colorete en las mejillas.
Aparte de utilizar productos de mayor duración una de las formas de solucionar este problema es aplicarnos, antes de la base de maquillaje, una prebase. Podemos utilizar prebases para todo el rostro o bien sólo para las sombras de ojos, si lo que queremos es que se aguanten durante más tiempo casi perfectas.
Hay mujeres que antes de aplicarse las sombras se ponen un poco de corrector en el párpado intentando así que las sombras duren más. Sin embargo, la textura de éstas, tendente a ser grasa, no sólo no nos van a ayudar a lograr nuestro objetivo, sino que además pueden ocasionar la aparición de granitos o espinillas.
Lo mejor es utilizar el corrector para las ojeras y bolsas y en los párpados, antes del maquillaje, aplicar la prebase.
Hacerlo es muy fácil, ya que sólo tenemos que poner en la yema del dedo una pequeña cantidad de producto, y después, con pequeños toquecitos, extenderla por el párpado móvil. También se puede utilizar un pincel para hacerlo, aunque controlando bien que no apliquemos demasiada cantidad de producto.
La crema se absorbe casi instantáneamente, y será entonces cuando ya podamos aplicarnos la sombra de ojos. Además de lograr que la sombra dure más tiempo, también evitarán la formación de las pequeñas arruguitas en la parte superior del párpado móvil, con lo cual el resultado final será espectacular.