Con el paso del tiempo la piel comienza a perder elasticidad, lo que hace que ciertas zonas del rostro, como las mejillas, se “caigan” y aparezcan arrugas alrededor de los ojos o de la boca. Sin embargo no sólo es la edad lo que produce este descolgamiento, ya que factores como la falta de sueño, la mala alimentación, el estrés o los cambios hormonales también inciden en la pérdida de elasticidad, así como la falta de tono muscular.
Una de las formas para contrarrestarlo es aplicándonos tratamientos específicos antiedad (antiaging), que retrasan la destrucción del colágeno, la elastina o el ácido hialurónico, agentes que logran que la piel se mantenga tersa y joven. También podemos utilizar cremas y otros productos ricos en algas y ácido hialurónico, que contribuyen a la firmeza de la piel, además de nutrirla gracias al alto contenido en vitaminas, minerales y proteínas de las algas.
Es conveniente mantener la piel hidratada, bebiendo abundante líquido, ya sea agua o zumos, e introducir en nuestra dieta alimentos ricos en antioxidantes (las frutas y las verduras rojas y naranjas, principalmente), ya que nos ayudarán a retrasar el envejecimiento y ayudarán a la regeneración de la piel.
Por otra parte, también podemos aumentar la tonicidad muscular del rostro mediante algunos ejercicios sencillos que te mostramos a continuación:
– Si queremos eliminar las bolsas de debajo de los ojos, deberemos colocar yemas de los dedos índice y pulgar en el extremo de los ojos. A continuación abriremos y cerraremos los ojos haciendo esfuerzos por vencer la resistencia de los dedos. Para que sea efectivo es necesario repetir el ejercicio 20 veces con descansos de 3 minutos.
– Para combatir la flacidez de las mejillas tensaremos los labios, colocándolos en forma de O. Los mantendremos así cinco segundos y a continuación relajaremos la zona durante unos cinco minutos. Repetiremos 5 veces.