Con la llegada del verano, llega un momento que para muchas es angustioso, como es volver a sacar el bañador o el bikini del armario o ir a la tienda a comprar uno nuevo y comprobar que, un año más, no hemos podido librarnos de esa barriguita que nos ha acompañado durante todo el invierno y que nos hemos propuesto quitarnos para lo operación bikini, pero al final no lo hemos logrado.
Para evitar sentirnos acomplejadas y disfrutar completamente de la playa o la piscina, nada mejor que seguir unos pequeños trucos que nos permitan disimular esa barriga y vernos más atractivas:
Para el bikini, olvídate de la braguita baja y de nudo, que acentuará tus curvas. Lo mejor es recurrir a la braguita alta o al culote, que te permitirán disimular los excesos del invierno. Para acentuar más el efecto, puedes elegir colores oscuros, aunque nada te impide llevar bikinis de colores vivos, como azules o verdes si te gustan, aunque sí debes renunciar a los estampados en la braguita y dejarlos para el sujetador.
Si aún así no te ves bien en bikini, lo mejor es optar por el bañador de una pieza. Uno de los modos de disimular la barriga es optar por aquellos bañadores que presentan una banda ancha en la cintura o incluso un cinturón, que, aunque en un principio pueda parecer que centran más la atención en la cintura, ayudan a disimularla. Eso sí, debes elegir bien el bañador de tu talla para que la banda o el cinturón no estén demasiado apretados. Lo mismo ocurre si elegimos un traje de baño con elástico para disimular la barriga.
Aunque parece que la única opción es el negro, el azul marino, el marrón, o incluso colores más atrevidos como el naranja o los tonos claros, pero escogiendo siempre diseños lisos.