Con el cuello suele suceder como con el escote. Es una de las partes que más se tiende a olvidar en los rituales de belleza y en los cuidados personales que se realizan. Sin embargo, es un área a la que también hay que prestar atención porque su piel es muy delicada y en ella se nota muy fácilmente el paso del tiempo, siendo más complicado evitar que se aprecien los años. Con unos consejos se puede conseguir mejorar su aspecto y que aparezca además mucho más esbelto.
Las claves
Como toda piel, con independencia de la parte del cuerpo que sea, es preciso que esté bien hidratada para que se mantenga en perfectas condiciones. Para ello, es conveniente aplicar la misma crema hidratante que se emplea para el rostro en esta zona. Además, conforme se van cumpliendo años, hay que nutrirla y empezar a utilizar cremas y productos antiarrugas.
No hay que olvidarse también de evitar las exposiciones al sol, sobre todo, sin protección porque es una de las partes en la que más se acusa el efecto negativo de los rayos solares y en la que igualmente pueden aparecer manchas.
Además de estos rituales de belleza que mejoran el aspecto del cuello para que se mantenga más joven, hay una serie de ejercicios que ayudan a que sea más esbelto, contribuyendo a aumentar el atractivo de esta parte del cuerpo.
Los ejercicios son muy sencillos y se pueden hacer en casa en pocos minutos. Tan solo se necesita una colchoneta si dispones de ella –en caso contrario, directamente sobre el suelo-, y una pelota pequeña de goma, que sea blanda.
Una vez estamos listas, hay que tumbarse boca arriba –se pueden doblar las rodillas para tener la espalda mejor apoyada y no que no se resientan las lumbares-, y poner la pelota bajo la cabeza, en la zona de las cervicales. Posteriormente, hay que llevar la barbilla ligeramente hacia atrás presionando al mismo tiempo la pelota con la parte superior de la cabeza.
Desde ahí, hay que comenzar a dejar de presionar la pelota para volver la barbilla de nuevo hacia el pecho y a la posición original para comenzar a realizar de nuevo el movimiento. Como todo ejercicio, se tiene que hacer varias veces, pudiendo descansar entre series.