Muchas mujeres tienen una piel totalmente lisa y de porcelana, sin embargo otras no lo consiguen porque hay ciertas imperfecciones en la dermis como es el caso de los poros. Realmente, es un problema estético porque suelen notarse incluso aunque se lleve un buen maquillaje. Eliminarlos no siempre es sencillo y, a veces, no se consigue nunca, aunque sí es posible mejorar el aspecto de la piel y que parezcan más pequeños.
Los consejos
Los poros suelen tener una importante carga genética. De ahí, que muchas veces sea difícil acabar con ellos y conseguir lucir una piel de porcelana. En estos casos, no hay que bajar la guardia y hay que seguir cuidándose para mejorar el aspecto de la dermis.
Lo principal es incidir en la limpieza con productos específicos, ya que así el poro parece que tenga un aspecto visualmente más pequeño porque está limpio. Y es que si se acumula la suciedad, la grasa o sebo o bien se oxida, el poro se nota más, lo que crea el efecto de que es más grande y va ganando dimensión conforme se van acumulando más impurezas y para albergar más y más. También, este problema aumenta con el paso de los años y se va teniendo una edad más avanzada.
Por eso es muy importante hacer una limpieza de la piel todos los días en casa y hacer alguna más profunda y específica para los poros de forma regular. Igualmente es fundamental la exfoliación de forma periódica y, sobre todo, utilizar productos astringentes y matificantes porque habitualmente los poros van asociados a las pieles grasas o mixtas.
Las mascarillas purificantes también son una buena opción porque, además de limpiar bien la piel, la dejan más suave y se nota rápidamente que el poro se queda más pequeño. Entre las mejores, están todas aquellas de arcilla.
A la hora de las cremas, se debe prestar atención a las que se emplean, siendo las más adecuadas las que ayudan a revitalizar la piel y que tienen vitamina C o E, entre otros componentes, ya que se trata de retrasar el envejecimiento de la dermis lo máximo posible y retrasar la oxidación para que no se acentúe el problema con el paso del tiempo.
Pasados los 30 años también es conveniente emplear cremas con ácido hialurónico y retinol para que la piel no pierda firmeza y mantenga su nivel de hidratación, de manera que contribuya a su vez a retrasar los signos de la edad.