Aunque hay personas que tienen poca edad y que no les correspondería tener arrugas por sus años, lo cierto es que se aprecian líneas de expresión en su rostro. Una situación que no siempre se debe a que no se cuide bien la piel o a que no se siga una buena alimentación. La clave puede estar en gestos cotidianos que, muchas veces, se hacen de forma inconsciente, pero que están favoreciendo que aparezcan las temidas arrugas.
Los gestos
En el día a día, hay que estar pendiente de los gestos que se realizan para no favorecer que aparezcan las arrugas, aunque tampoco es cuestión de estarse todo el día con el rostro impasible y sin mover ni un solo músculo facial.
Dentro de los gestos que son más habituales y que tienen una relación directa con las arrugas es fruncir el ceño, que propicia que entre los ojos aparezcan las líneas de expresión, así como en la parte baja de la frente. Este gesto, por ejemplo, sí se podría evitar al 100%, al igual que las arrugas que se producen al gritar.
Y es que elevar la voz y dar gritos tampoco es compatible con tener una piel lisa y tersa. El motivo es que los movimientos que se hacen al gritar también contribuyen a que aparezcan las líneas de expresión, aunque se haga para reducir tensión.
Entornar los ojos igualmente facilita la aparición de las arrugas, que sobre todo tienden a aparecer en el contorno de los ojos y el ceño. Es un movimiento que suele hacerse habitualmente para centrar o fijar la vista, siendo necesario corregirlo porque puede deberse a problemas de visión. También se realiza de forma instintiva cuando hace sol para protegerse de los rayos solares para lo que es más recomendable utilizar unas gafas.
Y, finalmente, otro de los gestos que crea arrugas es reír. En este caso, es más difícil de evitar porque, además, es recomendable reírse porque es beneficioso para la salud. Las líneas de expresión suelen aparecer en la comisura de los labios y en el contorno de los ojos. Así que, si eres muy sonriente, refuerza los cuidados con cremas específicas en estas partes del rostro.