En más de una ocasión ya hemos hablado de lo delicada que es la piel de la zona del escote y del cuello y lo fácil que es que aparezcan en ella las arrugas o líneas de expresión, que no solo se producen por el paso de los años, sino también por los gestos y posturas que se adoptan. Un problema que tiene solución con cuidados que se pueden proporcionar a esta parte del cuerpo de forma natural.
Remedio natural
Aunque en las tiendas de cosmética o de venta de productos de belleza se pueden encontrar diferentes cremas y productos que ayudan a acabar o, al menos, paliar este problema, en casa también pueden prepararse fórmulas que son muy útiles.
Una de las mejores y más efectivas viene de la mano de dos productos: el aceite de jara y el aloe vera. Su utilización es muy sencilla, puesto que solo se tiene que emplear una gota de aceite de jara, que se debe depositar en la mano, siendo conveniente mezclarla con un poco de gel de aloe vera. En este caso, la cantidad es como la de una nuez.
Tras la mezcla de estos dos componentes, ya se puede extender por la zona. El movimiento de aplicación es también muy importante, debiendo extenderlo hacia el pecho y los hombros durante la noche porque es fotosensible. Un motivo por el que, cuando se emplee, siempre hay que proteger la zona de los rayos solares, aunque sea al día siguiente de su uso.
La clave de esta mezcla radica en las propiedades que tienen ambos productos. De sobra son conocidas las bondades del aloe vera –que ya hemos comentado en más de una ocasión-, así como las del aceite de jara, que tiene un gran potencial regenerante y tonificante de la piel.
Además, el aceite de jara está especialmente recomendado para las pieles maduras, aunque se debe evitar en el caso de las pieles sensibles en las que puede producir alguna reacción. Tampoco está indicado para las mujeres embarazadas. Y, sobre todo, el aceite de jara no debe utilizarse nunca solo. Siempre hay que mezclarlo. En este caso, hace una buena combinación con el aloe vera.