La piel que rodea los ojos es muy delicada y sensible. Con el ajetreo diario, se va notando que se apaga la mirada, se pierde luminosidad y se inflama la zona, sobre todo si se pasan muchas horas delante del ordenador, aparte de acentuarse las arrugas. Son casos que pueden tener solución con unas mascarillas caseras muy sencillas de utilizar y que son un perfecto complemento a los tratamientos que apliques en tu día a día.
Mascarilla de pepino
El pepino es uno de los alimentos que más se emplea en cosmética para la zona de los ojos. Y es que es ideal para rejuvenecer la mirada y devolverle toda la luminosidad, aparte de ser muy hidratante y refrescante.
Esta hortaliza está especialmente indicada para tratar todos los problemas en la zona alrededor de los ojos que están relacionados con el exceso de pigmentos. Si este es tu caso, esta mascarilla te permitirá hidratar, tonificar, iluminar y rejuvenecer la mirada.
Su preparación es muy sencilla. Solo tienes que mezclar bien unas rodajas de pepino y añadir una cucharada sopera de vaselina. Esta mezcla la debes guardar en la nevera durante unos minutos antes de utilizarla.
Esta combinación de pepino y vaselina se aplica realizando un suave masaje con la yema de los dedos en la zona de los ojos. Tras su aplicación, debes esperar a que actúe durante unos 10 minutos.
Lo mejor es que la realices a primera hora de la mañana o por la noche, que es cuando resulta más efectiva porque la zona de los ojos está más inflamada.
Hamamelis
Cuando en la zona de los ojos hay también un problema relacionado con la circulación sanguínea, es necesario utilizar otro ingrediente: hamamelis. La razón es que ayuda a descongestionar toda esta zona.
En este caso, lo que hay que preparar es una infusión de hamamelis, que se aplica una vez está fría sobre la zona de los ojos. Para ayudarte, puedes utilizar dos discos redondos de algodón como los que empleas para desmaquillar.
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