Las saunas faciales, están cada día más de moda. Con esto de los spa, tomar una buena sauna es algo muy recomendable para nuestro cuerpo. La sauna facial es una excelente forma natural de realizar limpiezas profundas a nuestro rostro. Si quieres realizarte una buena sesión de sauna facial, no hace falta que acudas a uno de estos centros, ya que en casa, puedes hacértela tú misma.
Para realizar en causa una sauna facial, debes coger un recipiente con agua (una olla, por ejemplo) y dejarlo que se caliente hasta que veas que está hirviendo. Cuanto esto suceda, deberás agregar alrededor de unas 4 gotas de cada uno de los aceites esenciales requeridos según tu tipo de piel. ¿Qué no sabes que aceites debes usar? Toma nota:
– Piel normal: aceite de mandarina y aceite de lavanda
– Piel grasa: aceite de limón y aceite de eucalipto
– Piel seca: rosa y aceite de manzanilla
Según tu tipo de piel deberás elegir los aceites que te comentamos y agregarlos en el agua hirviendo. Cuando retires el recipiente del fuego, lo mejor es que te vayas a una habitación en la que puedas estar tranquila y lo coloques sobre una mesa, no demasiado elevada. Coloca algo en la mesa para que no se estropee por el calor de la olla o el caso que hayas utilizado.
Después de esto, colócate una toalla sobre tu cabeza e inclínate hacia el recipiente a una distancia de unos treinta centímetros. Aguanta en esa posición durante un par de minutos. Este proceso te ayudará a la apertura de los poros de la piel y por lo tanto la eliminación de las toxinas.