Las noches sin dormir o en las que apenas podemos descansar algunas horas, ya sea porque tenemos que robar horas al sueño o porque hemos salido a divertirnos nos pasan factura, especialmente la piel del rostro, que aparece cansada, tensa, seca, desmejorada y sin brillo. Para evitar esto, podemos, una vez a la semana, utilizar mascarillas que nos ayuden a rehidratar la piel, recuperando su brillo y su suavidad:
– Mascarilla de naranja: Para prepararla necesitas medio aguacate que esté bastante maduro, dos cucharadas de jugo de naranja, un cuarto de pepino y dos rodajas finas de patata. Licúa el pepino y añade la pulpa del aguacate, mezclándolo todo bien. A continuación añade el zumo de naranja y aplica la mezcla sobre el cutis dejándola actuar de treinta a cuarenta minutos.
Durante ese tiempo, colócate las rodajas de patata en los ojos y relájate. Finalmente aclárate con agua tibia y aplícate una crema hidratante. Esta mascarilla está especialmente indicada para recuperar el buen aspecto de la piel después de una noche de fiesta en la que hayamos trasnochado hasta altas horas.
– Mascarilla de plátano: Machaca un plátano y añade zumo de limón hasta lograr una consistencia cremosa. Aplica la preparación sobre el cutis durante unos quince minutos, preferiblemente por la noche antes de irte a dormir. Finalmente retírala con agua tibia.
– Mascarilla de melocotón: Necesitas un melocotón muy maduro, media cucharadita de miel, una cucharada de yogur natural y media cucharadita de zumo de limón. Licúa el melocotón y añade el resto de los ingredientes, extendiendo la mezcla resultante por todo el rostro, cuidando de que no entre en los ojos. Déjala actuar durante veinte minutos y aclárate con agua todo lo fría que puedas resistir. Esta mascarilla te ayudará a recuperar el brillo de tu piel cuando se encuentre muy matificada.