Muchas mujeres tienen más cabello durante el embarazo. Durante 9 meses la mujer vive una época de cambios corporales y de vello. Por ejemplo, el pelo es más abundante y grueso y no crece tanto como cuando no se está embarazada. Se dice que con la llegada de un nuevo bebé, el pelo se encuentra en un periodo de descanso y no recupera la normalidad hasta seis meses después del parto.
Los altos niveles de hormonas durante el embarazo hacen que el cabello permanezca más tiempo en periodo de descanso. Esta etapa provoca que el cabello se caiga menos a diario, por lo que da la impresión de que el pelo es más grueso y abundante.
Medio año para recuperar la normalidad
Una vez se ha dado a luz, el pelo tarda medio año en recuperar su estado original. Se acorta la fase de descanso anterior y el pelo se cae más a menudo. Esta pérdida de pelo es normal, ya que durante 9 meses el pelo no se ha regenerado tanto como debía.
Si el pelo se pone demasiado fino, no te preocupes porque esto no quiere decir que necesariamente se cause calvicie. Aun así, conviene controlar la salud del cabello.
Consejos para conservar la salud del cabello
No obstante, la mujer sí puede hacer algo para cuidar su pelo. Conviene comer saludablemente y llevar una vida equilibrada tras el embarazo. Las frutas y las verduras fortalecen el cabello y fomentan su crecimiento.
Evita utilizar los secadores y las planchas. Si tienes que secarte el pelo hazlo pero con la temperatura fría de aire. Esto evitará dañar tanto el cuero cabelludo y se podría ralentizar la caída.
Por otro lado, se recomienda llevar el pelo lo más suelto posible. Esto es, no hacerse recogidos muy tirantes que, al fin y al cabo, no hacen más que perjudicar el cabello. Si aun así continúa la caída del cabello puede que carezca de las vitaminas suficientes y es aconsejable acudir a un especialista.