Vayas donde vayas este verano, aunque no salgas de la ciudad y optes por la piscina, hay algo de lo que no puedes olvidarte en tu bolsa o maleta: el protector solar. Todos los años surgen innovaciones y novedades que ayudan a proteger la piel y a ponerse morena sin perjudicar la piel y la salud. Aquí te recomendamos unas cremas que puedes tener en cuenta y que son aptas para muchos bolsillos.
Protectores
La primera recomendación es la Loción Alta Tolerancia Dermocalmante Piel Sensible SPF 50+ de ROC, que ofrece una protección elevada para todo el cuerpo, siendo especialmente indicada para pieles sensibles, puesto que no lleva parabenos conservantes ni perfume. Para conseguir un buen resultado, hay que aplicarlo de forma uniforme por la piel hasta que penetre, lo que es fácil puesto que tiene una textura muy ligera y no grasa. Además, una ventaja es que no deja película blanca sobre la piel. No obstante, es importante repetir la aplicación con frecuencia y, sobre todo, después de salir del agua.
Otro de los protectores es la Bruma Solar Acabado Seco SPF 50 de Biotherm, que aporta frescor y protección a la piel con un acabado mate y no graso. Su textura también es muy ligera y no tiene alcohol. Está enriquecida con sílice mineral y nylon para absorber el sudor y los brillos de la piel, dejándola seca. Una ventaja es su sistema de filtros fotoestable, que incluye Mexoryl XL para una alta protección contra los rayos UVA y UVB.
De la mano de Vichy llega Capital Soleil BB Emulsión Tacto Seco SP50, que igualmente ofrece una amplia protección puesto que también incorpora Mexoryl, protegiendo contra rayos UVA y UVB. Además, permite conseguir un bronceado natural y prácticamente inmediato gracias al efecto BB. Este producto tiene que aplicarse antes de la exposición al sol y renovarlo frecuentemente, sobre todo, si se suda o bien se sale del agua.
Y, por último, hablamos de la última línea de Nivea Protege & Refresca, que se basa en una textura ligera y transparente que incorpora mentol para refrescar y que la piel tenga una sensación de frescor frente a las altas temperaturas, mientras se está protegido. La aplicación debe ser generosa, siendo conveniente reaplicarla tras el baño o secarse con la toalla.