Cuando se llega a los 35 años aproximadamente ya es habitual que se empiecen a ver las primeras canas, aunque hay mujeres que observan cómo su pelo se empieza a teñir de blanco antes de esa edad. Es un momento muy duro, no lo vamos a negar. Pero tiene solución. Y es que atacar las primeras canas es posible y no siempre es necesario acudir a los tintes ni arrancárselas para acabar con ellas.
Consejos
Como siempre, la mejor arma para mantener el buen estado del cabello y su color es la prevención. En este caso es clave llevar una vida sana de la que el ejercicio forme parte del día a día y utilizar productos específicos según las necesidades de nuestro pelo.
Además, vital es seguir una buena alimentación. Sí, se dice siempre cuando se habla de belleza, pero es que en relación al pelo tiene una especial importancia. De hecho, las canas pueden aparecer por falta de determinadas vitaminas que, si se ingieren, propician que se retrase su aparición. De este modo, hay que incorporar a la dieta vitamina B12, cuya producción se facilita a través de los cereales y yogures.
También se pueden adoptar algunos trucos caseros, por ejemplo, para lavar el cabello. Lo mejor es utilizar el champú habitual y mezclarlo con una solución que se ha realizado con salvia y romero en agua hirviendo. Eso sí, hay que aplicarla filtrada y una vez esté fría. Con el paso del tiempo, las canas se van oscureciendo.
Otra posible solución es aclarar la base natural del cabello para que haya menos contraste y se disimulen más las canas o bien optar por unos reflejos o mechas con las que igualmente se consigue simularlas. Son consejos con los que no hay que recurrir a tener que teñir todo el pelo por unas canas incipientes, retrasando la utilización de estos productos para cuando ya haya muchas más que no se puedan disimular de otra manera.