La composición de las cremas para la piel, sobre todo las faciales, es mucho más importante de lo que se tiende a pensar. Y es que siempre es importante que contengan aquellos principios que son fundamentales para la dermis. No obstante, también es cierto que, a veces, los ingredientes que se especifican en los envases son difíciles de entender porque no se conocen o se explica para qué son beneficiosos. Por eso hoy, vamos a hablar de los ceramidas, que son claves para la piel.
La importancia de los cerámicas
Los ceramidas están presentes en muchas cremas hidratantes para el rostro y para el cuerpo. Y es que es un ingrediente muy importante porque ayuda a que la piel esté correctamente hidratada, aparte de evitar su envejecimiento.
Este ingrediente se encuentra, además, de forma natural en la piel, pero es importante fortalecerlo y darle una mayor aportación a la dermis para que no descienda su presencia por el paso del tiempo o bien por unos inadecuados cuidados.
Y es que los ceramidas actúan como una barrera natural de la piel, de manera que se evita que pierda agua, manteniendo así su nivel adecuado de hidratación en todo momento.
Beneficios
El principal beneficio de los ceramidas es una adecuada hidratación de la piel porque, sin este aporte, la dermis se vuelve más seca, aparte de perder firmeza y luminosidad natural.
Además, la carencia de ceramidas en la piel también hace que esta se vuelva más irritable, aparte de favorecer la aparición de los signos del envejecimiento.
Aplicación
La mejor forma de aportar ceramidas al rostro es a través de las cremas que lo incluyan como ingrediente. No obstante, también hay marcas que comercializan cápsulas monodosis.
En cualquier caso, lo más recomendable es aplicar estos productos en la zona del rostro, cuello y escote tanto por la mañana como por la noche. Si se emplea una hidratante sin ceramidas, la aplicación de este ingrediente tiene que hacerse previamente a la crema habitual que emplees.
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