La depilación es una rutina de belleza ineludible para todas las mujeres y, afortunadamente, cada vez más para los hombres. Pero no siempre es una tarea agradable, por ello, a menos que te hayas decidido por una depilación láser que haya eliminando completamente el vello de tu cuerpo, te proponemos una serie de consejos que harán la depilación más fácil.
– Antes de depilarte lo mejor es tomar un baño al que se debe añadir un poco de sal, de forma que la piel esté más suave, lo que hará más sencilla la tarea de la eliminación del vello. No lo tomes demasiado caliente, ya que la piel estará hipersensible y puede ser contraproducente en algunos métodos depilatorios.
– Mantener la piel libre de impurezas y células muertas facilita en gran medida la tarea, por lo que es importante realizar una exfoliación periódica. Sin embargo, no te depiles nunca después de exfoliar la piel, sino que debes dejar al menos dos días para permitir que la piel se recupere.
– Si vas a utilizar las pinzas en zonas como el labio superior o las cejas, una buena idea para minimizar el dolor y evitar que la zona enrojezca tras la depilación es aplicar un cubito de hielo en la zona inmediatamente antes de utilizar las pinzas.
– Si te depilas con maquinilla, vigila que estén en buen estado. Cambia periódicamente las cuchillas y, si son nuevas, presta atención a las zonas de las articulaciones, que es donde más riesgo hay que producirse un corte al depilare.
– Antes de empezar a depilarte, echa en un vaso de agua unas aspirinas, de forma que cuando hayas terminado se hayan disuelto. Aplica el agua en la zona que te hayas depilado y notarás cómo la piel se alivia, haciendo desaparecer la irritación.