El embarazo o las ganancias o pérdidas rápidas de peso provocan la aparición de estrías en la piel. Para evitar su aparición, es necesario hidratar lo más posible la piel, de forma que las fibras de colágeno no se rompan. Si aun así nos han aparecido las estrías, podemos aplicarnos una serie de cremas naturales que ayuden a hacerlas desaparecer si son muy recientes o consigan que sean menos visibles, si las tenemos hace tiempo.
– Crema de rosa mosqueta: Para prepararla necesitas 100 g de hojas frescas de diente de león, medio litro de agua, medio vaso de zumo de aloe vera, siete gotas de aceite de rosa mosqueta y harina de avena. Comienza hirviendo el diente de león en el agua durante unos diez minutos y déjalo reposar hasta que se enfríe.
Pásalo a otro recipiente y añade el aloe vera, la rosa mosqueta y harina de avena hasta lograr una consistencia pastosa. Bate la mezcla y aplícala sobre las estrías, dejándola actuar durante una hora. Después, aclárate con agua tibia. Repite el tratamiento cinco veces por semana y podrás comprobar los resultados.
– Crema de vitamina E: Mezcla 1000 UI de vitamina E con una cucharada de aceite de oliva y masajea la zona en la que tengas estrías por la mañana y por la noche. Este remedio es muy efectivo especialmente para tratar las estrías de los senos y del estómago.
– Crema de aguacate: Necesitas medio aguacate, una cucharada de zumo de limón y una de miel. Mezcla la pulpa del aguacate y el resto de los ingredientes hasta lograr una crema homogénea. Aplica la cream todos los días mediante masajes circulares para ayudar a la desaparición de las estrías.