Después de tomar el sol, nuestra piel queda reseca y deshidratada y, en muchas ocasiones, dañada por los rayos ultravioleta, lo que favorece la pérdida de elasticidad y el envejecimiento de la misma, que se vuelve opaca, y aparecen manchas y arrugas.
Para evitar esto, nada mejor que aplicar una serie de cremas naturales refrescantes que ayuden a nuestra piel a minimizar los daños del sol, refrescarse y recuperar la elasticidad perdida. Aquí te presentamos algunas de las más efectivas:
– Gel refrescante de aloe vera: Para prepararlo necesitas 60 mililitros gel de aloe vera o sábila, 7 gotas de aceite de caléndula, 7 gotas de aceite de rosa mosqueta y 3 gotas de aceite esencial de lavanda. Si vas a utilizar pulpa de aloe vera directamente extraída de la planta, es necesario que antes limpies la hoja con una gasta empapada en alcohol, quites las espinas y después ya puedes extraer el aloe del interior. Si no, puedes utilizar gel de aloe comprado en una tienda. Una vez lo tengas, mezcla con un palillo de madera todos los ingredientes y coloca la preparación resultante en un envase de vidrio hermético que deberás guardar en la nevera para aumentar su poder refrescante.
– Crema de avena: Necesitarás 5 cucharadas de avena, un chorrito de aceite de almendras dulces y dos 2 cucharadas de yogur natural recién sacado de la nevera. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una pasta homogénea y aplícalo sobre la piel durante 15 minutos, especialmente en las partes más dañadas por el sol. Después retíralo con agua tibia. Esta crema también la puedes utilizar para el rostro.
– Crema de vinagre de manzana: Mezcla dos cucharadas de puré de calabaza, una cucharada de vinagre de manzana y una cucharada de agua de rosas. Deja actuar sobre la piel durante un cuarto de hora antes de retirarla.