Junto con el rostro una de las partes más importantes del cuerpo que siempre debes lucir de manera perfecta es el cuello. Aunque muchas personas, casi nunca le tiene en cuenta, el cuello puede sufrir de la misma manera que el rostro la dureza de los cambios ambientales e incluso, algunas alergias. Es muy propenso a sufrir sequedades y arrugas por lo que es muy recomendable que se le tenga en cuenta a la hora de realizar sesiones de belleza.
La primera regla para el cuidado del cuello es la de no detenerse con los tratamientos faciales en la barbilla. Se debe hidratar la zona, limpiarla, tonificarla y exfoliarla. El cuello debe ser masajeado con los productos de limpieza que se utilicen con bastante intensidad pero con mucha delicadeza. El cuello es una parte del cuerpo muy delicada, así que no lo frotes vigorosamente con las manos.
Es raro ver un rostro joven y fresco, con un cuello feo, por lo que las atenciones a la zona deben ser continuas. En verano, debes aplicar bastante cantidad de protector solar en la región del cuello, sobre todo en la parte delantera. Posteriormente, debes realizar una buena limpieza para que no se quede con restos de crema. En cuanto al maquillaje, tampoco te detengas en la cara.
Debes recordar que las arrugas llegan hasta el cuello, así que aplica una buena cantidad de maquillaje para esconder las imperfecciones que creas oportunas. El ejercicio es vital. Haz fáciles ejercicios de estiramiento que no te quiten mucho tiempo del resto de tus rutina. Simplemente podrás sentarte y mover la cabeza de atrás hacia delante.