El escote y el pecho son una de las zonas más bellas de las mujeres y que gusta lucir tanto en invierno y, sobre todo, en verano con camisetas más escotadas y el bikini. Pero también es una de las partes del cuerpo más delicadas y a las que conviene prestarle atención porque en ella se refleja rápidamente el paso del tiempo, aparte de perder tonicidad que favorece la aparición de las arrugas y la caída del pecho. Un problema al que se puede poner solución con dos sencillos ejercicios.
Ejercicios
Los dos ejercicios se pueden hacer en casa en cualquier momento. Es suficiente con dedicar entre 5 ó 10 minutos al día. Y, como siempre, en primer lugar ropa cómoda. Para el primero de ellos, necesitamos la ayuda de una goma elástica. Hay que ponerse de pie y pasarla la goma por debajo de los pies. Con cada mano hay que sujetar uno de los extremos.
Posteriormente, hay que juntar las manos a la altura de la cintura o vientre bajo y tirar de la goma hacia arriba, de manera que se elevan los manos en dirección al cuello con un movimiento con el que se doblan los codos. Desde esa postura, hay que volver a bajar para que las manos regresen a la posición inicial.
Otro de los ejercicios consiste en coger un libro que tenga las tapas duras y sea ligeramente grueso. El siguiente paso es levantar los brazos hasta la altura del pecho y doblarlos por los codos, de manera que las palmas de las manos queden juntas frente a los pectorales.
Desde esa posición, hay que colocar el libro en el medio de las dos manos, sujetándolo con ambas y haciendo una presión hacia él. Notarás que el pecho se contrae. Hay que estar en esa postura unos segundos y luego aflojar para volver a hacer la presión sobre el libro.