Las >brochas de maquillaje tienen una función determinada según su forma. De hecho, hay unas que son idóneas para aplicar la sombra de ojos, mientras que otras son para los labios, el blush, la base de maquillaje… Y también están las brochas ovaladas, que quizá sean las grandes desconocidas del neceser, pero que cumplen importantes funciones. ¿Cuáles son?
SEGUIR LEYENDO «Manual de uso de las brochas ovaladas»
Cómo limpiar tus brochas de maquillaje
Las brochas de maquillaje están en permanente contacto tanto con los productos que aplicamos como con nuestra piel, lo que hace que acumulen restos de antiguo maquillaje, impurezas, grasa e incluso gérmenes y bacterias cada vez que los utilizamos. Si, por accidente, se caen al suelo o se nos pierden por el bolso, se ensuciarán aún más, y esa suciedad irá a parar a nuestra piel cuando las utilicemos para maquillarnos de nuevo, pudiendo provocarnos irritaciones o la obstrucción de los poros.
Para evitar esto y mantener nuestras brochas en perfecto estado, vamos a mostrarte cómo limpiarlas de forma que puedas casi estrenarlas como el primer día.
SEGUIR LEYENDO «Cómo limpiar tus brochas de maquillaje»
Brochas de maquillaje
Utilizar las brochas correctas para aplicarte el maquillaje es fundamental para sacar el máximo partido a tu belleza.
Como bien dice Bobbi Brown, las herramientas apropiadas son tan importantes como el propio maquillaje.
Para empezar, debes pensar qué es lo que necesitas, y para ello tienes que repasar el tipo de maquillaje que utilizas: ¿Sombras de ojos en polvo o en crema? ¿Te aplicas una sola sombra de ojos o varias? ¿Las mezclas? ¿Utilizas corrector?
En general, son preferibles las brochas de pelo natural para las texturas en polvo, y los aplicadores sintéticos (tipo esponja) para las cremas.
Estas son algunas de las brochas más utilizadas, aunque existen bastantes más, con estas tendrás más que sufuciente para realizar un maquillaje de calidad:
Brocha para polvos: brocha de tamaño extra-grande, para polvos sueltos o compactos.
Brocha para blush (colorete): más estrecha que la anterior, esta brocha de maquillaje es la idónea para fundir el blush sobre el rostro.
Pincel para el corrector: permite la aplicación del corrector en el punto justo.
Pincel para sombra de ojos: perfecta para aplicar la sombra de ojos bien difuminada por todo el párpado.
Aplicador de esponja: ideal para mezclar y difuminar la sombra de ojos, tanto en polvo como en crema.
Pincel para el eyeliner: permite aplicar el eyeliner con precisión, tanto en seco como húmedo.
Pincel para labios: para aplicar el labial, una vez perfilado el contorno del labio.
Pincel biselado: específico para rellenar las cejas con color.
Peine metálico: define y separa las pestañas tras aplicar la máscara.
Peine doble: para peinar pestañas y domar cejas rebeldes.
Los pinceles y brochas más utilizados deben lavarse a menudo; al menos una vez por semana. Aunque si las usas para aplicarte productos húmedos, como fondo de maquillaje, sombras en crema o eyeliners, la limpieza debe de ser diaria.
Para ello puedes utilizar un champú neutro o para bebés (aunque también el gel para la limpieza de la cara puede valer) y abundante agua templada. Deja secar la brocha al aire, en posición horizontal, pero sin que el pelo roce la superficie.
Con respecto a los aplicadores de sombra de ojos, esos que tienen una esponja pequeña en el extremo, te recomiendo que utilices líquido desmaquillador de ojos.