Tradicionalmente, la laca se ha utilizado para fijar el cabello una vez se ha terminado de peinar y el pelo está bien seco. Sin embargo, este gesto y toque final tiene ya los días contados. Y no es que se vaya a acabar la laca porque se han ido lanzando otros productos para fijar el peinado, sino que también surgen novedades y avances en este tipo de fijadores. De hecho, ahora, ya es posible aplicar la laca con el pelo mojado.
La laca
Afortunadamente, se van lanzando novedades con innovaciones interesantes en el sector del cabello y de la peluquería que hacen la vida mucho más fácil y cómoda, sobre todo, cuando no se dispone de mucho tiempo para peinarse.
Y, dentro de estas últimas innovaciones, están las lacas que se emplean con el pelo húmedo o mojado. La clave está en que tienen unas fórmulas que permiten este tipo de aplicación en lugar de tenerlas que poner siempre al final del peinado y con el cabello ya totalmente seco.
Aplicación
La aplicación es muy fácil de hacer. En primer lugar, lo que tienes que hacer es retirar el exceso de humedad del cuero cabelludo con la ayuda de una toalla para que el pelo quede simplemente húmedo y no empapado en agua.
A continuación, tienes que hacer separaciones del cabello en secciones para, luego, aplicar el producto desde las raíces hacia las puntas, tratando de hacer la pulverización a una distancia de unos 15 centímetros aproximadamente.
Una vez hayas terminado, el siguiente paso es cepillar el cabello. Ya solo queda que seques el pelo. Y esto lo puedes hacer dejándolo secar al aire libre o de forma natural o bien haciendo uso del secador de pelo.
Con este sistema, notarás que el cabello tiene más cuerpo, lo que es muy útil en aquellos casos en los que se tiene un pelo muy fino y con poco volumen. El efecto, además, es inmediato, aunque se nota que, conforme el pelo va perdiendo más humedad, va ganando grosor.
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