Es la tendencia del verano. Atrás quedaron las uñas nude y los brillos en color natural. Ahora lo que está de rabiosa actualidad es decorar la manicura con una dosis extra de imaginación. Todo está permitido si el resultado es llamativo, original y muy especial.
Se llama nail art y el propio nombre lo dice: arte en las uñas. Esmaltes de todos los colores que se te pasen por la cabeza, rayas, lunares, estampados imposibles… Lo único que se necesita es creatividad y un poco de pericia. Te contamos los secretos de las manicuras más atrevidas para este verano.
La imaginación al poder
Para empezar, si te quieres apuntar a la moda del momento, necesitas que tus uñas estén en perfecto estado, y también tus dedos. Así que cuídalas, hidrátalas (y también las cutículas) y prepáralas para el verano. Cuando tengan la longitud adecuada a tus gustos, dales una forma bonita y natural con ayuda de una lima. Utiliza una de cartón, las de metal podrían resquebrajarlas.
El siguiente paso es decidir por dónde empezar, pues es tanta la variedad de motivos que puedes encontrar, que te costará trabajo. Si no eres experta en manicura, comienza por pintarlas de los colores del verano: rosa flúor, verde esmeralda, amarillo chillón… Combina los esmaltes con tus estilismos favoritos, usando el mismo tono en manos y pies para no desentonar.
También puedes utilizar la técnica de la manicura francesa pero usando colores más atrevidos que los tradicionales: uñas en negro con el borde amarillo o fucsia, por ejemplo, sería una forma de conseguir un toque gótico en las manos. Y, a partir de ahí, deja volar tu imaginación. Apuesta por los tatuajes para uñas, por las pegatinas con diminutas flores, por los motivos geométricos y las aplicaciones de brillantes en todos los colores. El mercado te surtirá de lo que necesites: rotuladores extrafinos para hacer decoraciones, calcomanías con relieve, aplicaciones en dorado o plateado… Todo un universo de diseño a tu alcance.