Con el paso del tiempo van apareciendo las temidas canas. Sin embargo, gracias a los avances de la cosmética ya no es tanto problema tenerlas porque se pueden teñir y hacer que desaparezcan. Además de ir a la peluquería, también puedes utilizar productos y tintes que están preparados para realizar el proceso en casa de forma sencilla y en pocos pasos.
El proceso
Lo primero que hay que saber es que hay diferentes productos para teñir las canas. De esta manera, se puede elegir la coloración permanente, que suele ser la más habitual cuando las canas cubren más del 50% del cabello. No obstante, hay otras opciones como los tintes sin amoníaco o los rápidos que en diez minutos se está lista. Además, hay diferentes acabados en gel, líquido o en mousse, entre otros. Dentro de este espectro, el primer paso es elegir el producto según el tipo de canas que se tengan, ya que algunas son muy resistentes para lo que se aconseja tintes que lleven amoniaco.
Tras este paso, hay que comenzar todo el proceso. Una vez en casa, hay que abrir el pack que se ha comprado y leer muy bien las instrucciones, aunque en general suelen ser todas bastante similares y no es habitual que haya particularidades. De este modo, hay que ponerse los guantes que vienen y sacar los botes que contiene el producto –suele ser un colorante y un revelador-, teniendo que introducir el primero dentro del segundo. En algunos casos puede ser necesario agitar la mezcla o removerla, mientras que en otras no es preciso. Depende del tinte que se haya elegido.
Posteriormente, aplica el producto sobre el cabello desde la raíz hacia las puntas, de manera que quede bien cubierto y bien extendido por toda la cabeza. Puedes ayudarte de cepillos o peines e, incluso, extender una primera capa con las manos, según la textura del tinte, si te resulta más fácil para luego hacer una mejor distribución del tinte con el cepillo o peine.
Una vez dado este paso, toca esperar el tiempo preciso. Suele ser unos 20 o 30 minutos, según el tinte que hayas comprado, aunque también puede ser menos si has optado por uno rápido. Normalmente, en el envase y las instrucciones suele figurar el tiempo exacto para que no tengas problemas.
Pasado el tiempo, hay que lavar el pelo como si no lo llevaras teñido, pero con abundante agua para que se aclare bien. Una vez hecho, suele ser habitual que en el pack que has comprado venga algún bálsamo o acondicionador que hay que aplicar y que ayuda a que se suavice el pelo y se fortalezca. Tras esta aplicación, solo queda secar y peinar como más te guste. Y ya estás lista y sin canas.