El estrés no solo tiene repercusiones en la salud de las personas, sino que sus efectos negativos también se notan en la piel, sobre todo, en la del rostro. Apariencia de cansancio, tensiones, piel más deshidratada o bien incluso aumento de la presencia de granitos… son solo algunos síntomas de que la dermis puede estar estresada. Una situación a la que conviene ponerle solución. Con unos sencillos trucos para relajarse puede ser suficiente. Además, puedes hacerlo en casa sin necesidad de tener que acudir a clases específicas.
La relajación
En primer lugar, hay que buscar un lugar tranquilo en casa. A continuación, nos tenemos que sentar en el suelo con las piernas cruzadas, aunque también es posible hacerlo sentadas en una silla y manteniendo la espalda bien recta y las manos apoyadas sobre los muslos. En cualquiera de estas dos posiciones, es conveniente dejar los labios entreabiertos y la lengua relajada, mientras que los ojos deben permanecer cerrados pero sin forzar el gesto.
Una vez se ha conseguido esa posición, el siguiente paso es respirar de una manera natural, mientras la mente hace un seguimiento de la respiración, pero sin querer modificarla. Es importante ser consciente de ese ritmo respiratorio: inspiración, ligera retención del aire, espiración.
Cuando se está haciendo este ejercicio, es habitual que en la mente aparezcan diferentes pensamientos. Es conveniente obviarlos y seguir centrándose en la respiración. Al principio, puede costar un poco y es posible que la atención se desvíe. No es problema. Con volver otra vez a poner el foco en el ritmo respiratorio, todo solucionado.
Una vez se está centrada en la respiración, el siguiente paso es sentir la cara mientras respiras para ver si hay algún punto que duela, sea doloroso, haya mucha tensión… para tratar de relajarlo al respirar.
Finalmente, cuando ya te notes en calma y relajada –lo que suele suceder en unos diez minutos-, abre los ojos después de unos segundos y comprobarás como te sentirás mejor y menos tensa. Para que vayas notando más los efectos, es importante hacerlo de forma periódica.
Otros consejos
Cuando haces los ejercicios de relajación, también será de ayuda que haya en el ambiente olor a palo de rosa para lo que puedes utilizar aceites esenciales. Además, si es posible, igualmente puedes tenerlo en el trabajo para evitar el estrés, ya que este aroma está demostrado que ayuda a relajar.