Cuando queremos perder peso, generalmente nos ponemos a dieta e intentamos controlar una a una todas las calorías que ingerimos. Sin embargo, una dieta demasiado estricta nos puede suponer una gran sensación de privación, lo cual, unido al hecho de que no perderemos peso al ritmo que nos gustaría, nos llevará a saltárnosla y dejarla de lado.
Para evitar esto, y conseguir el cuerpo esbelto y bonito que deseamos, es imprescindible combinar una alimentación equilibrada con hacer ejercicio de forma regular. Podemos elegir cualquier tipo de ejercicio que nos guste, ya que nos ayudará a evitar la flacidez y eliminar toxinas, con lo que además el aspecto de nuestra piel será mucho más luminoso y sano, pero existen una serie de ejercicios que nos van a ayudar especialmente a librarnos de esos kilos de más.
Caminar es el ejercicio más completo, sobre todo si tienes sobrepeso, ya que no podrán en riesgo tus articulaciones. Si eres muy sedentaria, lo mejor es comenzar con 20 minutos diarios la primera semana, e ir aumentando este tiempo hasta llegar a caminar una hora al día.
En el trabajo, si estás sentada, es importante que te muevas durante diez minutos cada hora que estés sentada. Si no puedes, aprovecha las pausas del café o los minutos que estés ante la impresora o la fotocopiadora. En casa sigue la misma pauta cuando te sientes a ver la tele. Puedes, además, aprovechar esos diez minutos para hacer algún trabajo de la casa como barrer o tender la ropa.
Si quieres perder grasa en los brazos, la natación y los ejercicios con mancuernas te ayudarán a lograrlo. Para librarte de la grasa del abdomen, además de los abdominales puedes montar en bicicleta, nadar y bailar. Tus piernas se afinarán gracias al caminar, al jogging y a la bicicleta, ejercicios que también te ayudarán a conseguir unos glúteos más firmes.